a otro perro con ese hueso: boicot al mercado inmobiliario

Podemos elegir ser esclavos vitalicios de los bancos, hipotecar nuestra vida, claudicar ante el mayor robo del que jamás vamos a ser objeto, mientras que otros muchos no dejan de crecer en nuestro detrimento directo. Los bancos, las constructoras y las corporaciones no dejan de aumentar su poder para comprar a más y más políticos, tener más presencia en la bolsa internacional, aumentar su labor explotadora de mano de obra y el apoyo de la globalización a golpe de guerra, apropiamiento indebido, expropiación y privatización a nivel mundial.

Es hora de atar cabos: diría que la quiebra económica que se dió en varios paises hispanoaméricanos hacia el año 2001 no ocurrió por casualidad, fue provocada. Muchos factores entran en juego, sin embargo, desde un punto de vista global todo adquiere un sentido lógico. La disponibilidad de mano de obra barata es uno de los requisitos para la expansión del capitalismo y su crecimiento, al igual que lo son las guerras (con el florecimiento de la economía y acaparamiento de recursos que conllevan) por ello, parece adecuado pensar que todos estos detonantes (crash económico, amenaza terrorista) han de ser necesariamente planeados como si de estrategias de mercado se tratase. Hacerlo resulta más facil si existe una alianza internacional, léase G8, Unión Europea, Organización Mundial del Comercio, Banco Mundial, etc. Después de todo estamos en la época del bussiness management.

En medio quedan los ciudadanos comunes que hacen frente a la reubicación de empresas en Asia, la precariedad laboral, los contratos basura, el aprovechamiento y explotación de la mano de obra inmigrante (y los problemas de convivencia que puedan surguir en los barrios más humildes debido al aumento súbito de la inmigración), el endeudamiento vitalicio, la carestía de la vida en general y de uno de los bienes más necesarios en particular: la vivienda. Sin embargo esta situación no es de la incumbencia de los beneficiarios adinerados y las clases dirigentes, su posición está blindada, asegurada y sólo tiende a mejorar.

Tenemos cierto poder para luchar contra esta situación. Al tratarse de un bien de 1ª necesidad, habrá gente que no se lo pueda permitir (tal es el chantaje al que estamos sometidos) pero quienes podamos deberíamos elegir NO COMPRAR ni pagar alquileres abusivos, boicotear el mercado inmobiliario y exigir un cambio radical del mismo. Parece que la situación está en nuestras manos, ninguno de los gobiernos mayoritarios de este país va a hacer nada en nuestro favor. En Francia ya hubieran ardido coches o habría habido alguna huelga general. SAL Y MANIFIÉSTATE.